MARIA CASTAÑA tapas
María Auxiliadora, 32
Tfno. 95 5864508
Renovarse o morir. En este coqueto lugar han hecho un esfuerzo para ofrecer una exquisita cerveza natural y creemos todos que han dado con la tecla. Este establecimiento tiene un enorme potencial y después de varios enfoques y la meritoria intención de adaptarse a lo que viene, lo han sabido encauzar. El problema, a mi entender, es que con tanta letra bonita, estilismo y decoración han olvidado lo primordial... potenciar la cocina. Por aquello de que cada uno escoge y define su estilo, nada que objetar porque no haya frituras, salsas elaboradas ni guisos caseros... faltaría más; pero recurrir al embolsado, los panes y congelados para salir del paso es algo que te pasa factura tarde o temprano. Igual es que como es una cervecería (en la carta no lo pone y además hay dibujado un gorro de chef), priman los montaditos que todos tienen en Utrera (dichosos montaditos), las tostas (que manía de comer pan), las conservas (siempre las mismas) y las tapas frías. Con los precios que tienen en este establecimiento, aquello debería ser un Delicatessen con glamour y no lo que nos pareció.
ENSALADILLA
DE LA CASA (2'00€)... Muy rica, buena temperatura y voluminosa. COCTEL DE MARISCOS
(2'70€)... Fresquito y sabroso aunque mal presentado y sin lucimiento alguno volcado
encima de un plato llano. BOQUERONES EN VINAGRE (2'00€)... Comprados ya
elaborados con sabor a limón que no nos gustaron. SALMOREJO CON GUARNICIÓN
(3'20€)... Bueno, aunque algo líquido por aquello de ser un multiusos para
otras tapas. ¿Saben ustedes que un salmorejo es pan, tomate, aceite y poco más?
Se ve que lo casero lo cobran bien. Hablamos de tapas. ENSALADA DE CANÓNIGOS
CON QUESO DE CABRA, NUECES Y PASAS (3'50€)... Muy buena pero son casi 600 pesetas
por un cuenquecito de verde y cositas. TOSTÁ TRES QUESOS CON VIRUTAS DE JAMÓN
(5'00€)... Por aquello de que faltaban cosas en la carta que nos parecían más
interesantes, tuvimos que elegir un plan B y probamos una rebanada de pan con
mucha miga que llevaba queso por encima. Un mollete entero con jamón ibérico,
aceite de oliva y tomate fresco en la Plaza de Utrera acompañado con un café
con leche cuesta 1'95€ a la hora del desayuno. Anoche degusté en la misma plaza
un exquisito montadito crujiente y caliente de melva, queso y morrón con
guarnición que te deja casi cenado por 2'50€.
Siguiendo
esta lógica, tres rebanadas de pan con queso valdrían 15€, igual que cinco
tapas de una laboriosa y complicada Cola de Toro o una lata de un carísimo bloc
de foie de pato servida con unas rebanaditas de pan tostado y un coulís,
confitura o chutney de lo que sea. Pero es que... repetimos: aquello no es un Delicatessen
ni ofrecen nada que no esté en el super de al lado de casa.
BROCHETA DE
CASTAÑUELAS (2'80€)... Aceptable tapa. El distribuidor de congelados tiene de
todo y te lo pone tan fácil que te despreocupas, sigues el procedimiento y le
pones a todo la misma guarnición. BROCHETA DE ATUN (2'80€)... Idem que la
anterior. BROCHETA DE LANGOSTINO Y BACON (2'80€)... Idem que la anterior. LOMO
DE BACALAO CON ALI-OLI GLASEADO (2'70€)... Exquisito y jugoso. Con dos de esas
sales comido. Generoso y baratísimo platillo por el volumen de la pieza que
pierde mucho con la base de tomate frito de lata. ¿Ali-Oli glaseado? CARRILLADA
AL OPORTO (2'80€)... Sin rastro del dulzor del Oporto pero que estaba muy buena
sin salsa. Lo que se dice un guisote en condiciones de los que Margari, la
chica de la cocina, querrá cocinar mas.
Mas detalles:
Pan 0 (no es la mayúscula de la o sino la puntuación cero) que calientan
pero sirven crudo y chicloso. Atención,
ritmo y servicio más que agradables - Elena nos atendió estupendamente- fresquito,
música de fondo, T.V. y una luminosidad excelente por aquello del enorme
ventanal. Hay limpieza y los baños están equipados. Abren a las 7 de la mañana
para los desayunos y acaban de madrugada porque ofrecen de todo. Buen café y
copas.
Buena gente
pero, siendo objetivos, aquello es caro para la calidad que ofrecen. Además no
todos los precios del ticket coinciden con los de la carta. Hoy por hoy, la
gerencia de esta maravilla de local ofrece una simplista estructura y un
dislate de carta con 20 tapas frías, 20 panes, 20 tapas de plancha y un solo
guisote que a veces ni tienen y que no se distingue de nada ni de nadie, aunque
poseen el enorme potencial de que es un sitio sensacional. Cruce de caminos y
esquina de paso que en cuanto modifiquen la carta, ajusten los precios
(rebanada de pan con queso y tinto de verano por 7€ es una barbaridad),
introduzcan tapas de cocina y algo de autenticidad, será un lugar espectacular.
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