CAMBIO MI ESPADA POR LA PLUMA

CAMBIO MI ESPADA POR LA PLUMA
TWITTER @cyranodeutrera

sábado, 24 de octubre de 2015

LA PRIMERA DAMA SIRIA





 ASMA ASSAD ESPOSA DE BACHAR AL ASSAD


Guapa es como ella sola, y fina , elegante y glamurosa. Una mujer con estudios, rigurosa formación académica y un estatus privilegiado tanto en lo familiar como social.


Siria agoniza. Más de 100.000 personas han muerto en una guerra civil que dura ya dos años. 2 millones de refugiados que han salido huyendo del país por miedo al cerdo de su marido, un dictador sin escrúpulos que es capaz de gasear a su propio pueblo pará así seguir manteniendo la autocracia que a su esposa le permite llevar el tren de vida del que presume.

 

 La comunidad internacional baraja una intervención militar para evitar los ataques con armas químicas que, supuestamente, el régimen emplea contra la población.



Pero ella vive en un mundo aparte, en su paraíso particular, en un lugar idílico donde los niños son felices y los refugiados reciben platos de comida servidos de su propia mano. Asma Asad, la primera dama siria, se ha convertido en la protagonista de un desvergonzado plan de relaciones públicas elaborado por los asesores de presidencia para tratar de ocultar las horrendas atrocidades llevadas a cabo por las fuerzas de su marido.


                        




La que en su día fue retratada como «la rosa del desierto», la luchadora que dejó su brillante carrera en la City por amor, la responsable de romper barreras en el mundo árabe al casarse con un alauí (siendo ella suní), se ha convertido en una María Antonieta alejada completamente de la realidad. Mientras los líderes internacionales debaten la mejor manera de finalizar una sangrienta guerra civil en la república árabe, Asma publica cada día en la cuenta de Instagram de la presidencia de Siria imágenes que nada se corresponden con lo que se está pasando en la calle.



La plataforma está siendo utilizada por el régimen como una herramienta de propaganda repugnante en un intento de vender una mentira al mundo exterior, haciendo ver que todo está bien. Pero la opinión pública no se deja engañar. A pesar de las fotografías que salen a diario en la Prensa de todo el mundo, Asma aparece como una esposa devota y sonriente mientras abraza a mujeres desvalidas y prepara sopa a los refugiados en la cocina móvil de voluntarios.




 Mientras su pueblo se muere de hambre, ella luce sin ruborizarse un dispositivo diseñado para controlar la cantidad de pasos y las calorías que se pierden para poder adelgazar. Y así, todos sus actos solidarios tienen una contraprestación para su perfecta y cuidada imagen.





Asma nació en Londres hace 38 años. Es hija del cardiólogo Fawaz Al Akharas y Sahar, una ex secretaria de la Embajada de Siria en la capital británica. A pesar de ser musulmana, fue a una escuela de la Iglesia de Inglaterra, donde era conocida como Emma. Después de estudiar Ciencias Informáticas y Literatura Francesa en el Kings College de Londres, trabajó en la City con Deutsche Bank como analista financiera y con JP Morgan en la década de los noventa, cuando conoció a su futuro esposo.



Antes de que comenzara la guerra, su rostro aparecía en las portadas de las publicaciones más prestigiosas y las revistas de moda se la rifaban para describir la elegancia con la que desfilaba sobre sus tacones Christian Louboutin.  Hubo algunos que incluso se atrevieron a bautizarla como la princesa Diana de Oriente Medio, por combinar a la perfección belleza y estilo, con obras de caridad. Pero nada más lejos de la realidad. Asma ha resultado ser una señora sin escrúpulos, sin moral y sin ningún tipo de conocimiento o preocupación por el mundo que la rodea.



Las fotos engañan a muy pocos ...«¿Mataste a esos niños después de darles de comer, Asma? Les matas cada vez que miras hacia otro lado mientras miles mueren cada día», «Esos niños están tristes y no tienen comida porque tu marido está matando a sus familias. ¡No vas a comprarnos con imágenes bonitas! #FreeSyria» son sólo algunas de las frases que dejan sus detractores.


 

La guerra civil entre el régimen y los rebeldes ha obligado a casi dos millones de sirios a dejar el país buscando cobijo en estados vecinos. En un principio, muchos medios aseguraron que tanto Asma como sus tres hijos se refugiarían en Moscú para mantenerse a salvo y no tener problemas en caso de que Asad fuera derrotado. Pero ahora parece que la estrategia es completamente opuesta y la primera dama se ha convertido en una especie de herramienta esencial para mostrar una imagen de normalidad.





 El único refugio de la primera dama, por tanto, es la realidad distorsionada que ha creado en su mente y muestra en cada una de sus fotos... Unas instantáneas que verifican que ya no queda nada de la «rosa del desierto».



Asma Asad no tiene reparos. Mientras las agencias de noticias envían cada día cientos de imágenes que muestran la desolación, la muerte y la hambruna de una guerra civil que ya dura dos años, la primera dama siria se dedica a pasearse por las principales ciudades posando, con mucho acierto, con los más desfavorecidos. En cualquier otro contexto, las imágenes podrían ser incluso conmovedoras: la cercanía de una gobernante que se preocupa por su pueblo. Sin embargo, a Asma el tiro le ha salido por la culata: en lugar de ganarse a la opinión pública y conseguir suavizar la dura imagen que su marido proyecta hacia el exterior, ha incendiado el ánimo de un pueblo masacrado. Los medios de todo el mundo ya están analizando la vil estrategia del matrimonio.





Cuando la guerra civil en su país había acabado con la vida de 20.000 personas, Asma Asad no tenía reparos en seguir gastando su inmensa fortuna. Durante el enfrentamiento entre el régimen y los rebeldes que teñían a Siria de sangre, la primera dama se gastó 270.000 libras en una de las tiendas más exclusivas de Chelsea, Londres, para la decoración de uno de los palacios que posee la familia en la ciudad costera de Latakia, a 200 kilómetros al norte de Damasco. Más de 130 artículos de lujo para seguir con la frivolidad de Asma Assad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

UTILIZA LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN CON EDUCACIÓN Y HAZ TU COMENTARIO.