SUSANITA TIENE UN RATON

 TRANSPARENCIA Y REGENERACION

"Susana Díaz centrará su investidura en la lucha contra la corrupción". Bueno, bueno... ¿Los mismos que la han puesto donde jamás imaginara van a ser perseguidos por ella? Seguid robando pero no reirse mas de nosotros, inmorales.Una chica amamantada con el biberón del puño y la rosa en Andalucía no podrá nunca suponer ningun tipo de regeneración. ¿De donde va a sacar tiempo para gobernar e ilusionar  teniendo que sellar y precintar las alcantarillas del régimen, contentar a sus mentores y claudicar ante los comunistas mientras habla de "cambio" o "un tiempo nuevo"? La propaganda progre seguirá surtiendo efecto mientras haya analfabetos que acepten que la culpa es de otros y todo el mundo viva del cuento.

Esta chica tiene tatuado todo su cuerpo con los eslóganes que nos han llevado a la ruina y está infectada del virus socialista andaluz hasta las cejas, de los conspiraciones del aparato, del abrazo cómplice del régimen y la herencia deshonrosa de quienes solo se han dedicado a robar.

Esta gente habla como si no lleváramos 30 años gobernados por gobiernos de izquierdas. Lo que tenemos es la consecuencia de su gestión y los males que padecemos han sido inoculados por ellos solitos. Bueno, solitos y solitas con su falsa doctrina.
¿Qué demonios va a hacer esta mujer con UGT y CCOO? ¿Seguir pagando chantajes para comprar la paz social? ¿Cuántos millones les va a soltar para que sigan con su entramado mafioso y protesten solo contra el PP? Repetimos: que esta región lleva tres décadas expoliándose por los socialistas y son los únicos responsables de nuestra ruina.

Esto es mas de lo mismo. Puro cinismo. Y se ríe el tío.

Susanita tiene un ratón y no precisamente chiquitín. Antonio Maestre es el número tres de su ejecutiva. Hay que ser muy ruin y mezquino después de lo que este desalmado ha hecho, para salir sonriendo en la foto del nuevo tiempo andaluz, el de la transparencia y la regeneración democrática. ¿No se les cae la cara de vergüenza con esas frasecitas? Los mismos que nos meten en el lodazal son los que abanderan la reconquista de la Andalucía imparable. Habrá que ser inmoral y tener la cara dura.

Este tío solito con dos secuaces ha dejado en la mas absoluta ruina a una población vecina de 37.000 habitantes. ¿Cómo se pueden deber 100 millones de euros? ¿Qué diferencia hay entre Utrera y Los Palacios? La Fiscalía lo ha denunciado por una trama de falsas ayudas de la Junta. Ahora, después de décadas de latrocinio y olvido, la Junta reclama la devolución del fraude al nuevo alcalde de IU. Patético y vergonzoso. Cuando se le ha requerido toda la documentación, este desalmado le ha metido fuego al archivo donde estaban todos los informes originales del latrocinio. Si eso no se llama mafia, que venga Dios y lo vea. Mandaron a los Bomberos y a toda la policía de Los Palacios a una finca lejana con una falsa alarma para que diera tiempo a quemarse los comprometidos papeles antes de que llegaran a sofocar el incendio.

Este chanela, el tal Antonio Maestre, junto al ex Delegado de Igualdad y Bienestar Social de la Junta y la ex Delegada de Urbanismo del Ayuntamiento, malversaron fondos públicos y prevaricaron falseando documentos. Jamás realizaron  los proyectos subvencionados y el dinero no aparece por ningún lado. Hablamos de millones de euros para 3 Guarderías, un Centro Ecuestre, una Comisaría de Policía, un Carril Bici...etc. que jamás se tuvo intención de construir. Complicidad con la Junta pura y dura. Asociación de malhechores y ladrones varios.

Falsearon los informes, no acreditaban documentalmente las solicitudes, desviaban los fondos a otros fines no determinados, modificaban los proyectos falazmente enviándolos a la Junta hermana con otros fines distintos a los que inicialmente se le concedió la ayuda ... así hasta 16 escandalosas subvenciones que hoy investiga la Fiscalía, junto a otros ayuntamientos socialistas de la provincia que podrían haber realizado las mismas fechorías. Tener un compinche así como la J.A. es, sobre todo, la mayor de las garantías para que resguarden y amparen todas tus fechorías. Connivencia y asociación de malhechores se llama lo que va a gestionar esta chica. Una herencia que con gusto y complacencia va a aceptar Susana Díaz. Preparada está para ello desde la adolescencia. Griñán no tenia dudas de que ella iba a aceptar la propuesta, de que tragaría lo que fuera con tal de hacerse con la presidencia y de que taparía todas las alcantarillas malolientes que rezuman después de los mangazos socialistas durante décadas.

             

Pues con este personal se rodea la nueva Presidenta de la Junta de Andalucía. Susanita no tiene un ratón, tiene una cloaca llena de culebras venenosas de la misma familia que los reptiles de la famosa partida 31L que les robó el dinero a los parados. Y es que esta gente no tienen escrúpulos para seguir malversando.

Las investigaciones del Grupo de Delitos Económicos de la Guardia Civil han dado sus frutos y la Fiscalía se ha visto obligada a denunciar el caso en el Juzgado de Instrucción de Utrera. Difícil lo tienen despues de haber ardido todo el fichero de las pruebas de cargo. Resumiendo: recibieron millones, falsearon todo lo posible, los proyectos jamás se ejecutaron y el dinero no aparece por ningún lado. Puro estilo PSOE. Un escándalo!!

Con este panorama, es normal que el Partido Socialista de Los Palacios esté totalmente lleno de desertores y que nadie quiera figurar para comerse el marrón. No tienen a nadie porque van por el segundo suplente en la cabeza de lista.

Susanita tiene un ratón que va a ir a la cárcel por mucho que ella diga que siente vergüenza por la corrupción. Es el número tres de su ejecutiva e irá al talego en pocos días, Susana Díaz. Valiente discurso de investidura... ni una sola mención a los ERE que la han colocado en la presidencia. Usted es una ingrata que después de criarse con Viera, Monteseirín y Griñán (todos investigados por corrupción y mojados hasta las cejas) se atreve a decir que de esas conductas se avergüenza sin que se le caiga la cara (redundo y repito queriendo) de vergüenza.